martes, 22 de mayo de 2012

Luis Astuquillca : Quiero pedirle a los policías que aprendan a querer a la Institución y que valoren las enseñanzas de nuestros instructores







 

Ministro Calle encabeza ascenso de Luis Astuquillca

Martes, 22 de Mayo 2012 | 8:10 am

Ceremonia se realiza en la Dirección Nacional de Operaciones Especiales, a la cual pertenece el valiente suboficial.


Astuquillca está ´dispuesto´ a regresar a zona de combate| PUB

El ministro del Interior, Wilver Calle Girón, encabeza la ceremonia de ascenso al grado de suboficial de segunda Luis Astuquillca, el valiente joven de la Policía que sobrevivió 17 días en la selva tras un ataque narcoterrorista.

La ceremonia se realiza en la Dirección Nacional de Operaciones Especiales (Dinoes), a la cual pertenece Astuquillca Vásquez, ubicado en el distrito de Ate Vitarte.

Una vez que el suboficial PNP haya recuperado totalmente su salud, será propuesto como auxiliar para una agregaduría policial en el exterior, por su destacada acción policial y alta preparación.

Calle Girón también anunció que se realizan las gestiones para dotar de mayor apoyo logístico a la Dinoes.

El ministro se entrevistó con el suboficial Astuquillca durante la visita que realizó ayer al Hospital de Policía donde se recuperan miembros de la Policía Nacional del Perú heridos en acción.

Luis Astuquillca recibió personalmente el reconocimiento del ministro del Interior por su valor y preparación que le permitió sobrevivir en condiciones extremas, tras perder contacto con su patrulla en abril último, cuando las fuerzas del orden participaban en el operativo de rescate de los trabajadores del proyecto Camisea.


 

Luis Astuquillca será ascendido por valor en lucha contra subversivos

El suboficial PNP que sobrevivió 17 días en la selva de Cusco recibirá una agregaduría policial en el extranjero

Cusco, Narcoterrorismo, Operación Libertad, Luis Astuquillca Vásquez, VRAE, La Convención
Lunes 21 de mayo de 2012 - 08:11 pm
Luis Astuquillca recibió un justo premio por su heróico acto. (Andina)
(Andina). El ministro del Interior, Wilver Calle, anunció hoy el ascenso del suboficial PNP Luis Astuquillca Vásquez, quien sobrevivió 17 días en la selva del Cusco, durante la Operación Libertad.
El suboficial Astuquillca, quien pertenece a la Dinoes, será ascendido a suboficial de segunda, grado inmediato superior al que tiene actualmente.
El titular del portafolio del Interior presidirá este martes la ceremonia, a las 7:30 a.m., en la sede de la Dinoes.
Asimismo, el ministro Calle Girón anunció que una vez que el suboficial Astuquillca Vásquez haya recuperado totalmente su salud, será propuesto como auxiliar para una agregaduría policial en el exterior.
MÁS APOYO LOGÍSTICO
Hoy el ministro Calle Girón visitó en el Hospital de Policía a los agentes heridos en distintas intervenciones. En el marco de su visita, acudió a la sala de hospitalización del paciente Elver Huamán Korinti, guía civil que se encontraba en el helicóptero en que falleció la capitana Nancy Flores Páucar, y que fue herido por los narcoterroristas durante la Operación Libertad.
El ministro ofreció apoyo a Huamán Korinti, quien muestra visible mejoría, para la ubicación y el trasladado a Lima de su hermana que se halla en Quillabamba a fin de reencontrarse con él.


Ascienden a Astuquillca    

También lo enviarán a agregaduría policial



Merecido reconocimiento. El suboficial de la Policía Nacional Luis Astuquillca Vásquez, quien sobrevivió 17 días en la selva cusqueña luego de enfrentarse a los narcoterroristas, será hoy ascendido al grado inmediato superior y enviado tras su completa recuperación a una Agregaduría Policial en el exterior.
Así lo anunció ayer el ministro del Interior, Wilver Calle Girón, luego de precisar que Astuquillca Vásquez será promovido al grado de suboficial de segunda por su valerosa acción en el Vrae.
Astuquillca Vásquez recibió con beneplácito la noticia y expresó su disposición de incorporarse pronto a sus labores.
Mientras que el ministro Calle Girón anunció que se vienen haciendo las gestiones necesarias para implementar y dotar de mayor apoyo logístico a las fuerzas de la Dinoes que operan el Vrae.

“Lloraba cada vez que terminaba el día y no pasaba ni un helicóptero”

Plegarias. Devoto de la Virgen de las Nieves -patrona de Coracora, la tierra de su madre Fidelia-, Luis Astuquillca en sus momentos de desesperación rezaba por horas para no sentirse solo.


Plegarias. Devoto de la Virgen de las Nieves -patrona de Coracora, la tierra de su madre Fidelia-, Luis Astuquillca en sus momentos de desesperación rezaba por horas para no sentirse solo.
En sus alucinaciones debido a la fiebre, Astuquillca creía escuchar la voz de su compañero el suboficial César Vilca: "Ya te tocó la hora", imaginaba que le hablaba. El efectivo policial sintió que la muerte parecía estar cerca.
La desesperación comienza a hacer presa del suboficial Luis Astuquillca porque la herida de bala en la pierna comienza a infectarse. La fiebre, el hambre, la sed y el sueño lo derrumban. Ni una sola señal de un ser humano en la extensa selva cusqueña. Recurre a los rezos a la Virgen de las Nieves y al poco tiempo encuentra plátanos verdes, que devora como único menú. Otra jornada de tristeza y miedo en una zona desconocida.
Creí que instalarme en una choza me haría bien, que descansaría tranquilamente y que recuperaría fuerzas para caminar monte arriba. Ocurrió lo contrario.
No tenía energías para levantarme.
El dolor de la pierna derecha herida era insoportable y el cuerpo me temblaba. Sentí mucho frío en un lugar donde el calor era insoportable. ¿Será así que viene la muerte? Traté de abrigarme con todo los trapos que había en el lugar. Hasta con bolsas plásticas me cubrí los pies. El frío no me pasaba.
Me agarró una tembladera que parecía un ataque de epilepsia. Sin duda, la herida estaba infectada y sufría los estragos de la fiebre alta. A esto hay que sumar que estaba sin alimentos y sin agua.
"Camachín, hasta aquí no nomás te quedas", escuchaba la voz de mi compañero César Vilca Vega.
Ya estaba alucinando por la fiebre.
Acerqué mi nariz a la herida y sentí cierto mal olor.
"Te estás pudriendo, Camachín", volví a oír a César Vilca.
La fiebre estaba haciendo efecto.
"Te tocó la hora", escuché otra vez a Vilca.
Eran mis alucinaciones.
Necesitaba agua a gritos. ¡Tenía el río a la mano! Pero para llegar hasta la orilla debía caminar entre cuatro y cinco horas, siempre y cuando la lluvia no se interpusiera y dificultara mi desplazamiento.
Como si viera la imagen de la “Virgen de la Nieves” en un rincón de la choza, le imploraba desde mi lecho para que me diera fuerza para salir de ese trance.
“No me dejes morir, guíame hacia la luz", le decía.
Ese día estuve toda la mañana en la choza. Temblando me quedé dormido, rezando, implorando a la Virgen de las Nieves.
LLANTO Y MIEDO
Desperté unas horas después, en la tarde, como a las tres o cuatro. El sol estaba esplendoroso. Me sentía un poco aliviado. Entonces decidí caminar un poco.
A pocos metros de la choza encontré un platanal.
"¡Gracias, Virgen de las Nieves!", exclamé.
Los plátanos estaban verdes, pero igual me los comí. Estaba con un hambre voraz. Un poco más y me comía todo el árbol. Entre comer plátanos verdes y tragar solo saliva hay una gran diferencia.
Regresé a la choza y comencé a devorar la fruta. Plátano por plátano. Despacio. Y mientras lo hacía, pensé en mi familia. Entonces se me ocurrió algo fúnebre. ¿Me habrán dado por muerto? ¿Estarán velando mi ropa con velas como se hace en la sierra? ¿Se habrán cansado de buscarme? ¿Creerán que los terroristas me secuestraron y me aniquilaron? ¿Me habrán dado ascenso póstumo?
Lo decía porque ningún helicóptero pasaba por la zona. ¿Qué otra cosa podía imaginarme? Yo no veía ningún movimiento que me indicara que me estaban rastreando. Nada.
"Ni un maldito helicóptero", murmuraba una y otra vez.
Lloré.
Lloré otra vez.
Lloré varias veces.
Lloré tanto que perdí la cuenta.
Lloré de tristeza.
Lloraba cada vez que terminaba el día y no pasaba ni un solo helicóptero.
Se me ocurrían explicaciones absurdas.
"Quizás ha pasado algún helicóptero y yo no lo he escuchado porque me he quedado sordo", me decía.
Era una forma de atenuar las circunstancias.
Me respondía: No creo, mi papá y mi mamá deben estar haciendo las gestiones para que las autoridades no dejen de buscarme.
Pero también pensaba que probablemente se cansaron, que no daban con mi ubicación, y se dieron por rendidos. Eso me dio miedo. Mucho miedo.
QUÉ PASABA EN EL PAÍS
Ollanta anuncia que rescatarán a los niños secuestrados por Sendero Luminoso
El presidente Ollanta Humala anunció que su gobierno rescatará a los niños secuestrados por Sendero Luminoso y que son adoctrinados e incorporados a columnas terroristas al mando de los hermanos Quispe Palomino.
"Estamos tomando medidas concretas para rescatar a los niños que están siendo explotados por la insania terrorista con la complacencia de sus padres", advirtió.
El suboficial Luis Guerrero Chumacero, uno de los sobrevivientes del helicóptero en el que falleció la capitana Nancy Flores, reveló que la nave fue atacada cuando estaba a punto de aterrizar, en Alto Lagunas.
"Mal herido yo repelí el ataque y no estuvimos solos había otro helicóptero que "roqueteaba" la zona, si no habríamos muertos todos.
MAÑANA: El último recurso: comer sal.


22 de Mayo del 20

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