Fuerzas Armadas pueden ser un ejemplo de amor por lo nuestro sin que
para ello deban empuñar un arma.
ESOS DE UNIFORME!
No ha sido sencilla la relación entre los
miembros de las fuerzas armadas y la población civil. Llamados a ser un
ejemplo de patriotismo y a velar por la seguridad nacional (como
efectivamente lo han hecho en diferentes jornadas heroicas) las
constantes interrupciones del sistema democrático y los años de
violencia interna generaron en muchos un marcado resquemor frente a
aquellos que decidieron lucir el uniforme militar. Polémicas aparte en
esta edición presentamos dos reportajes en los que queda claro como las
fuerzas armadas pueden ser un ejemplo de amor por lo nuestro sin que
para ello deban empuñar un arma. Por el contrario, los que llevan en las
manos los integrantes de la banda conjunta de las FF.AA. son
instrumentos musicales. Y no solo dan muestra de su capacidad de ejecución sino que- oh sorpresa- llegan a romper el protocolo, con lo que demuestran que en su piel puede estar marcada la disciplinada castrense, pero por sus venas la sangre lleva el ritmo y el sabor que caracteriza a los peruanos. Del mismo modo, en las alturas de Puno, el Ejército trabaja de la mano de los ronderos de la zona para sacar a delante una iniciativa que podría beneficiar a ambos.
Tanta es la compenetración entre ellos, que los campesinos han sido invitados para desfilar en la próxima parada militar.
Porque al final el uniforme que nos hermana es el orgullo de ser peruanos.
EDUARDO LAVADO G.
EDITOR GENERAL
LA BANDA CONJUNTA DE LAS FFAA EN ARGENTINA
EJÉRCITO, EMPRESA PRIVADA Y RONDEROS, UNIDOS POR LA GRANDEZA DEL PERÚ
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