El director de la Escuela de Comunicaciones del Ejército, Coronel EP Angel Augusto Sosa Guevara, resaltó el valor y la firmeza de José Olaya durante su lucha por la Independencia del Perú. Destacó también la misión del Arma de Comunicaciones relacionada al desarrollo tecnológico
VIDEO REFRENCIAL DE JOSÉ OLAYA BALANDRA
Ceremonia Central por el 192º Aniversario de la inmolación del Subteniente José Olaya Balandra y el 56º Aniversario de creación del Arma de Comunicaciones.
Las principales autoridades de la Institución presentaron una ofrenda floral ante la imagen de José Olaya, patrono del Arma de Comunicaciones.
El izamiento del Pabellón Nacional estuvo a cargo del General de Brigada Walter Astudillo Chávez, Presidente de la Comisión organizadora de las actividades celebratorias por el Día del Arma de Comunicaciones
Hijo de José Apolinario Olaya y Cordoba y Melchora Balandra, tuvo 11 hermanos. En la lucha por la Independencia del Perú, el prócer participó como emisario secreto llevando mensajes, entre el gobierno del Callao y los patriotas de Lima a nado. Fue descubierto, apresado, sometido a tormento y condenado a muerte; a pesar de las torturas, nunca reveló su misión y prefirió tragarse las cartas encomendadas para la misión. La independencia del Perú, declarada por primera vez en Huaura en el mes de noviembre de 1820 y el 28 de julio 1821 en Lima, solamente se había hecho efectiva en Lima y en el norte; pero Cuzco, la sierra central y el sur aún estaban bajo el dominio del ejército realista.
Cuando José de San Martín reconoció el poco apoyo que le dan las fuerzas políticas y militares, renunció ante el Congreso Constituyente de 1822. El congreso nombró como Presidente de la República a José de la Riva Agüero y presidente del Congreso a Francisco Xavier de Luna Pizarro. El ejército realista, aprovechando que las tropas patriotas se encontraban lejos, tomó Lima y los miembros del Congreso se sintieron obligados a refugiarse en la Fortaleza del Real Felipe en el Callao. Es en este escenario donde José Olaya, pescador de oficio, no dudó en servir de nexo entre las naves de la Escuadra Libertadora (formada por unidades de la República de Chile) y los soldados de las fuerzas patriotas (argentinos, chilenos y peruanos) ubicadas en Lima, aunque eso significara recorrer campos y cruzar el mar nadando.
Apresado por el ejército realista, lo torturaron con el fin de obtener información sobre las fuerzas patriotas. José Olaya Balandra no se amilanó ante el dolor. Sufrió los doscientos palazos y los doscientos latigazos que le aplicaron, no cediendo aún cuando le arrancaron las uñas. Finalmente, en la mañana del 29 de junio de 1823 pronunció la frase Si mil vidas tuviera gustoso las daría por mi patria y luego fue fusilado en el pasaje de la Plaza Mayor de Lima que ahora tiene su nombre: Pasaje Olaya.
El izamiento del Pabellón Nacional estuvo a cargo del General de Brigada Walter Astudillo Chávez, Presidente de la Comisión organizadora de las actividades celebratorias por el Día del Arma de Comunicaciones
José Silverio Olaya Balandra, (Chorrillos, 1782 - Lima, 29 de junio de 1823), fue un mártir en la lucha por la Independencia del Perú.
Biografía
JOSÉ OLAYA
Cuando José de San Martín reconoció el poco apoyo que le dan las fuerzas políticas y militares, renunció ante el Congreso Constituyente de 1822. El congreso nombró como Presidente de la República a José de la Riva Agüero y presidente del Congreso a Francisco Xavier de Luna Pizarro. El ejército realista, aprovechando que las tropas patriotas se encontraban lejos, tomó Lima y los miembros del Congreso se sintieron obligados a refugiarse en la Fortaleza del Real Felipe en el Callao. Es en este escenario donde José Olaya, pescador de oficio, no dudó en servir de nexo entre las naves de la Escuadra Libertadora (formada por unidades de la República de Chile) y los soldados de las fuerzas patriotas (argentinos, chilenos y peruanos) ubicadas en Lima, aunque eso significara recorrer campos y cruzar el mar nadando.
Apresado por el ejército realista, lo torturaron con el fin de obtener información sobre las fuerzas patriotas. José Olaya Balandra no se amilanó ante el dolor. Sufrió los doscientos palazos y los doscientos latigazos que le aplicaron, no cediendo aún cuando le arrancaron las uñas. Finalmente, en la mañana del 29 de junio de 1823 pronunció la frase Si mil vidas tuviera gustoso las daría por mi patria y luego fue fusilado en el pasaje de la Plaza Mayor de Lima que ahora tiene su nombre: Pasaje Olaya.
No hay comentarios:
Publicar un comentario