Escuela Militar de Chorrillos es una de las instituciones más antiguas de América Latina. Su creación data del 30 de Enero de 1830, durante el gobierno del Mariscal Agustin Gamarra y tuvo como local inicial un ambiente del Convento de San Pedro, sito en la calle de los estudios en Lima. De ella, luego de dos años de formación, egresó la primera Promoción de 109 Oficiales entre Subtenientes de Infantería y Alfereces de Caballería.
Recesada en 1834, fue reabierta por el Mariscal Ramón Castilla, el año de 1850, con el nombre de Instituto Militar. Este Instituto funcionó tan sólo durante cuatro años, primero en uno de los ambientes del Hospital Carrión, en Bellavista –– Callao y posteriormente, en un local ubicado en la Calle del Espíritu Santo en Lima. En este mismo local, con la denominación de Colegio Militar y Naval se restableció su funcionamiento entre 1859 y 1867 en que entró en nuevo receso.
Por Decreto del 1º de Octubre de 1872, el Presidente Manuel Pardo ordenó su reapertura con el nombre de Colegio Militar. Funcionó como tal hasta 1879, pues, a consecuencia de la Guerra del Pacífico, fue cerrado porque sus cadetes solicitaron ser dados de alta en el Ejército que marchó a la Campaña del Sur.
Después de la guerra con Chile, el Gral Andrés Avelino Cáceres, como una de sus primeras medidas de gobierno, decide reabrir el Colegio Militar, funcionando entre 1889 y 1894, en su local anexo al Cuartel Guadalupe.
Estas intermitencias en su funcionamiento terminaron a partir del 31 de Diciembre de 1896, cuando el entonces Presidente de la República Nicolás de Piérola, dispone la creación de la Escuela Militar y trae para su organización y dirección a una Misión Militar Francesa. Se le asignó como local la Escuela de Clases (““Los Cabitos””) en Chorrillos y fue inaugurada el 24 de Abril de 1898.
En tal oportunidad el Presidente Don Nicolás de Piérola expresó: ““En todas partes donde lata un corazón por amor a la Patria, donde hay un ciudadano que alberga al patriotismo en el pecho, allí existe un soldado; y para que este soldado sepa ir por el camino de la gloria, sepa vencer, es preciso que se instruya y aprenda, por que la milicia es una ciencia que hay que aprenderla””.
Su primer Director fue el Coronel Pablo Clement, quien ejerció el cargo hasta 1901; sucediéndole el Coronel Eduardo Dogny, el cual permaneció en el cargo hasta 1910.
En 1945, después de haber funcionado durante cuarenta y siete años en el local ““Los Cabitos””, se dispone su traslado a su actual local, con la denominación de Escuela de Oficiales; hasta que en 1951 mediante OGE Nº 38 DEL 18 DE Mayo, se oficializa el nombre de Escuela Militar de Chorrillos.
Por Ley Nº 26628 del 20 de Junio de 1996, el Congreso de la República autorizó el acceso de la mujer peruana a las Escuelas de Oficiales de las Fuerzas Armadas. En 1997, ingresan a la EMCH cincuenta damas, quienes forman parte de la promoción que egresará el 2001.
De 1901 al 2013 han egresado 109 Promociones de Oficiales en forma ininterrumpida, en las Armas de Infantería, Artillería, Caballería, Ingeniería, Comunicaciones y los Servicios de Material de Guerra e Intendencia.
La noble y patriótica misión de la Escuela Militar es la de ““Formar oficiales del Ejército””, orientados en el irrenunciable deber del sagrado amor a la Patria, a garantizar la independencia, la soberanía y la integridad territorial de la República, así como participar en el desarrollo socioeconómico del país.
Recesada en 1834, fue reabierta por el Mariscal Ramón Castilla, el año de 1850, con el nombre de Instituto Militar. Este Instituto funcionó tan sólo durante cuatro años, primero en uno de los ambientes del Hospital Carrión, en Bellavista –– Callao y posteriormente, en un local ubicado en la Calle del Espíritu Santo en Lima. En este mismo local, con la denominación de Colegio Militar y Naval se restableció su funcionamiento entre 1859 y 1867 en que entró en nuevo receso.
Por Decreto del 1º de Octubre de 1872, el Presidente Manuel Pardo ordenó su reapertura con el nombre de Colegio Militar. Funcionó como tal hasta 1879, pues, a consecuencia de la Guerra del Pacífico, fue cerrado porque sus cadetes solicitaron ser dados de alta en el Ejército que marchó a la Campaña del Sur.
Después de la guerra con Chile, el Gral Andrés Avelino Cáceres, como una de sus primeras medidas de gobierno, decide reabrir el Colegio Militar, funcionando entre 1889 y 1894, en su local anexo al Cuartel Guadalupe.
Estas intermitencias en su funcionamiento terminaron a partir del 31 de Diciembre de 1896, cuando el entonces Presidente de la República Nicolás de Piérola, dispone la creación de la Escuela Militar y trae para su organización y dirección a una Misión Militar Francesa. Se le asignó como local la Escuela de Clases (““Los Cabitos””) en Chorrillos y fue inaugurada el 24 de Abril de 1898.
En tal oportunidad el Presidente Don Nicolás de Piérola expresó: ““En todas partes donde lata un corazón por amor a la Patria, donde hay un ciudadano que alberga al patriotismo en el pecho, allí existe un soldado; y para que este soldado sepa ir por el camino de la gloria, sepa vencer, es preciso que se instruya y aprenda, por que la milicia es una ciencia que hay que aprenderla””.
Su primer Director fue el Coronel Pablo Clement, quien ejerció el cargo hasta 1901; sucediéndole el Coronel Eduardo Dogny, el cual permaneció en el cargo hasta 1910.
En 1945, después de haber funcionado durante cuarenta y siete años en el local ““Los Cabitos””, se dispone su traslado a su actual local, con la denominación de Escuela de Oficiales; hasta que en 1951 mediante OGE Nº 38 DEL 18 DE Mayo, se oficializa el nombre de Escuela Militar de Chorrillos.
Por Ley Nº 26628 del 20 de Junio de 1996, el Congreso de la República autorizó el acceso de la mujer peruana a las Escuelas de Oficiales de las Fuerzas Armadas. En 1997, ingresan a la EMCH cincuenta damas, quienes forman parte de la promoción que egresará el 2001.
De 1901 al 2013 han egresado 109 Promociones de Oficiales en forma ininterrumpida, en las Armas de Infantería, Artillería, Caballería, Ingeniería, Comunicaciones y los Servicios de Material de Guerra e Intendencia.
La noble y patriótica misión de la Escuela Militar es la de ““Formar oficiales del Ejército””, orientados en el irrenunciable deber del sagrado amor a la Patria, a garantizar la independencia, la soberanía y la integridad territorial de la República, así como participar en el desarrollo socioeconómico del país.
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